Esta era una boda que teníamos muchas ganas de decorar; había muchos motivos para ello. Fue una bonita ceremonia religiosa en la capilla de San Fermín, en Pamplona, lugar donde muchas parejas de Navarra contraen matrimonio. Es una capilla especial, y como seguro que todos ya las conocéis, no vamos a entrar en detalles…
En el exterior se puso alfombra y unos árboles decorados en la entrada. También acorde con la decoración interior.
Algo elegante, discreto, sobrio y, sobretodo, especial, como es la entrada a la capilla de San Fermín por la Iglesia de San Lorenzo en Pamplona.
Por último, realizamos un ramo de novia muy acorde con el carácter de la novia; un ramo de novia delicado, fresco, original, silvestre. Un ramo de novia ideal para una novia como ella, discreta, dulce, sencilla y bella. Fue la guinda a una boda perfecta que escribiendo en esta entrada hemos saboreado como si hubiésemos estado ahí.